lunes, 29 de septiembre de 2008

La bajeza del dolor


Este dolor bajo es una puñalada traicionera que me acribilla 
penetra mi pecho con suavidad y atraviesa mi corazón
una supecta furia sube por mi frente asentándose

Los mismas aceras sucias que recorría cuando el mundo era nuevo
el mismo cigarrillo amargo que solía fumarme a solas
solicitando calmar cada ira, cada caída en la lona
Y cuántos años más seguirá repitiéndose la misma escena,

cuanto tiempo seguiré usando el mismo medicamento
Porque el reconocimiento nos dura un respiro entre tanta mediocridad
pero el rigor es realmente quien dirige nuestras vidas
Porque es imposible mantenerse impune ante el zarpazo maquiavelico

de este mundo
Por la dicha perdida  a causa de la concupiscencia y nuestra omisión

Van las mismas suelas gastadas salen de las fábricas industriales
agobiados deseando al menos marear sus cerebros esta noche

Por tanto karsati estrujante
por tanta esencia maligna en el desorden

por tanto juramento en vano pronunciado
por tan póca veracidad sobre la salvación del alma

Porque la esperanza de nuestras vidas suele ser un sueño
de recompensa y deseos desmensurados.

(en construcción)

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